lunes, 26 de noviembre de 2012

Días de resaca (electoral) - Elecciones catalanas 2012

Días de resaca (electoral)




Las elecciones catalanas de ayer domingo nos han deparado alguna sorpresa que otra. Paso a hacer algunas consideraciones, totalmente subjetivas y sin ánimo de ofender a nadie.

CIU
Mas quiso aprovechar el momento de efervescencia creado a raíz de la última Diada para capitalizar el voto independentista y meter debajo de la alfombra su agresiva política de recortes - obligados o no, eso lo dejo a criterio del lector. El tiro le ha salido por la culata, porque pocas veces el ganador de unas elecciones ha sido tan claramente el perdedor de la noche. El electorado catalán no es tonto, y ha venido a decirle a Mas que se le ha visto el plumero: muchos catalanes están dispuestos a embarcarse en la aventura independentista, pero no van a dejar que el barco esté capitaneado por un partido que se ha subido a bordo en el último momento y por la puerta de atrás.

ERC
Para esos mismos votantes independentistas, ERC es the real thing, un partido que siempre ha defendido lo mismo, y no un oportunista. Es evidente que, aparte de despertar a un electorado que no había participado en las elecciones del 2010, se han llevado todo el voto que ha perdido CIU. Parte del mérito la tiene Oriol Junqueras, un hombre que, a pesar de su presencia discreta, es un tipo sensato, lejos de líderes republicanos de infausto recuerdo demasiado propensos al estrambote.

PSC
¿Quo vadis PSC? Me parece francamente lamentable que el segundo partido de Catalunya - sigue siéndolo por votos - haya encadenado a dos líderes tan grises como Montilla y Navarro. Una formación con esa base social, con cuadros bien preparados y que aspire a gobernar no puede permitirse el lujo de ser liderada por políticos tan faltos de carisma, por muy trabajadores, honestos y buenos chicos que sean. El votante socialista merece algo más. Lo único que me extraña es que sólo hayan perdido 50.000 votantes.

PP
El PP ha ganado tan sólo un escaño, y se queda en lo que probablemente es su techo electoral en Catalunya. Por mucho que el PP de Catalunya juegue a matizar las palabras que llegan de Madrid, la conducta prepotente y la sordera de la que hace gala el gobierno hacen que muchos catalanes, por más que desprecien otras opciones, no les votarán nunca. Bien es cierto que parte del voto anti-independentista se lo ha llevado Ciutadans, pero si este último partido no existiera, el PP tampoco podría capitalizar todo su voto.

ICV-EUiA
Los ecosocialistas han jugado su partido, y lo han hecho bien. Se les nota incómodos en el bloque independentista, por mucho que defiendan que, ante todo, están a favor del derecho a la autodeterminación. Por ello, ha sido acertado su enfoque de subrayar la defensa de los derechos sociales, que es su marca identitaria y cuyo léxico conocen bien.

Ciutadans
Se mire como se mire, Ciutadans ha conseguido un gran resultado. Ha triplicado su número de escaños, y prácticamente también de votos. A diferencia del PP, ha conectado mejor con el hartazgo de parte de la sociedad catalana que está cansada de la retórica nacionalista, pero no se identifica con la derecha y/o con las formas del PP. El reto para Ciutadans - al que se enfrenta, en realidad, desde su creación - es acabar de definir qué ofrece más allá del antinacionalismo. Rivera es un orador muy competente, aunque a veces debería moderar sus formas, un tanto agresivas.

CUP-Alternativa d'Esquerres
Los outsiders. Tiene mucho mérito, con la carencia de medios y de cobertura televisiva - no participaron en ningún debate - haber conseguido tres escaños y más de 125.000 votos. Ahora tendrán que demostrar que, más allá de dar la sorpresa, pueden defender con solvencia sus ideas. Y no se dejen engañar por la apariencia de cantante de grupo de ska de su líder: David Fernández habló ayer mejor que muchos líderes de partidos tradicionales. Será interesante seguirle.